El campo de golf de Playa Serena, en Almería, se riega ya con agua depurada
Miércoles, 18 de Julio de 2007
Fuente: Geoscopio/Madrid.
El campo de golf de Playa Serena ha comenzado a utilizar agua procedente de la reutilización de aguas residuales de la planta depuradora situada en Roquetas de Mar, en Almería. Concretamente, está recibiendo 1.800 m3 diarios, una vez terminada la canalización necesaria de cerca de 10 kilómetros de longitud.
Este es el primer resultado de las obras de adecuación en la planta depuradora de aguas residuales de Roquetas de Mar que está llevando a cabo la sociedad estatal Aguas de las Cuencas Mediterráneas, Acuamed, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente.
Gracias a una inversión de 5 millones de euros, esta infraestructura, cuyas obras finalizarán completamente en los próximos meses, permitirán llevar más de 13.500 m3 diarios de agua tratada para riego a los distintos usuarios, entre ellos, los
ayuntamientos de Roquetas de Mar y Vícar, la Comunidad de Regantes Sol y Arena y el club de Golf La Envía, además del mencionado campo de golf en Playa Serena.
EL PROGRAMA A.G.U.A. EN EL PONIENTE ALMERIENSE
Asimismo, la población almeriense de El Ejido recibe desde el pasado 5 de julio nuevos recursos hídricos, destinados a riego de zonas verdes, procedentes de la reutilización de aguas residuales de la planta depuradora situada en este municipio.
Estas obras, y las señaladas para Playa Serena, forman parte de las “Actuaciones complementarias de reutilización de aguas residuales en el Campo de Dalías”, declaradas como prioritarias y urgentes, y contempladas en el Programa
A.G.U.A. del Ministerio de Medio Ambiente. Estas actuaciones permitirán la obtención de en torno a 10 hectómetros cúbicos anuales de nuevos recursos mediante la reutilización de las aguas de las estaciones depuradoras de Adra, El Ejido y Roquetas de Mar, a las que se aplican los tratamientos terciarios correspondientes para que puedan ser destinarse a usos municipales, agrícolas y para campos de golf, beneficiando con ello a una población conjunta de más de 150.000 habitantes.
Los volúmenes de agua generados mediante estos procedimientos permiten sustituir las aportaciones procedentes de los acuíferos de la zona, actualmente sobreexplotados, así como las aportaciones del embalse de Benínar, gracias al esfuerzo concertado y de gestión sostenible de los recursos hídricos.