ENDESA ha puesto en marcha un proyecto para la modernización de las turbinas de vapor de sus centrales de carbón peninsulares. El proyecto contempla actuaciones en las centrales de As Pontes (La Coruña), Compostilla (Ponferrada), Teruel (Andorra-Teruel), Litoral (Almería) y Los Barrios (Cádiz). 

La modernización, que supondrá una inversión superior a los 54 millones de euros, consiste en la sustitución de todos los elementos móviles (rotor) y fijos de las turbinas de alta y media presión, por nuevos materiales con un diseño de última generación y alta eficiencia. Sólo se mantendrán las carcasas existentes de las actuales turbinas. 

Las modernizaciones se llevarán a cabo coincidiendo con las revisiones mayores de los grupos o con las transformaciones de las calderas, en el caso de As Pontes, y permitirán una extensión de la vida útil de las turbinas de alrededor de 25 años.

Las obras han sido adjudicadas a tres compañías de fabricación de turbinas bajo la modalidad de llave en mano y se prolongarán desde julio de este año hasta el año 2010, en el que se concluirá la modernización de la central térmica de Compostilla.

El objetivo principal del proyecto es la mejora del consumo específico de cada central en un 3%, gracias, entre otras cosas, a un diseño más eficiente y a la utilización de nuevos materiales.

La modernización de las turbinas de vapor tiene también otros beneficios, además de la extensión de su vida útil, como son el incremento de la potencia de salida, la mejora de la disponibilidad y la disminución de costes de mantenimiento inherentes a la utilización de componentes de nuevo diseño que aporta una menor degradación en periodos entre revisiones. 

Por todo ello, estas actuaciones permitirán mejorar notablemente la competitividad de las centrales de ENDESA en la península ibérica.

Desde el punto de vista ambiental, las ventajas son notables, ya que la modernización permitirá el ahorro de aproximadamente 290.000 toneladas de carbón al año y evitará la emisión a la atmósfera de 550.000 toneladas anuales de CO2.

Los trabajos de modernización de estas centrales requerirán para los próximos tres años más de 200.000 horas de trabajo de montaje, que suponen unos 42 empleos directos en la planta, y entorno a 20 empleos indirectos en diversas fabricaciones a lo largo del periodo de ejecución del proyecto.