"Será muy bonito con 4.000 metros cuadrados de placas solares", afirmó la responsable de Medio Ambiente de la muestra, Maite Gálvez, que recordó que la cubierta verde, que recubrirá el edificio soporte del pabellón de países participantes, tendrá también 10.000 metros cuadrados de placas fotovoltaicas.

Mientras que ya se está realizando el movimiento de tierras para construir el edificio de la central de energía, el concurso para construir la cubierta verde no saldrá hasta finales de año. Maite Gálvez explicó que "hasta que no esté terminado el techo no se puede montar la cubierta, pero el concurso tiene que salir pronto; de hecho estamos decidiendo si se podrá pasear por toda la cubierta o sólo por una parte para evitar que los visitantes toquen las placas fotovoltaicas".

Expoagua adjudicó a finales de abril la construcción y explotación de la central térmica de Ranillas a la UTE CAI-Ibercaja-Suez-Elyo Ibérica por 38 millones de euros. Se trata de una concesión por 30 años. Esta unión temporal de empresas invertirá unos 23 millones de euros y el resto, la Expo, para crear la red que permitirá abastecer de calefacción, agua caliente y aire acondicionado a todos los edificios que se construirán en el meandro. "Todos estarán refrigerados por la central que producirá ocho megawatios de energía y sobrará un poco para electricidad, que se incorporará a la red", explicó.

La responsable de Medio Ambiente de la Expo señaló que el edificio técnico de la central ya está adjudicado, al igual que la planta de cogeneración y sólo queda por elegir la empresa que se hará cargo de construir toda la red de tuberías subterráneas que transportará el frío y el calor a los edificios de la muestra.

Por último, Gálvez destacó que la arquitectura del edificio, que albergará la central, será de alta calidad, en línea con el de oficinas de la Expo y la nueva comisaría: "Al estar en un punto central de visibilidad, muy próximo a la avenida de Ranillas, el aspecto exterior del edificio, con cristal y placas solares, será muy cuidado".