TINO colabora con el medioambiente con un ambicioso plan de reforestación de canteras
Viernes, 28 de Abril de 2006
Fuente: Geoscopio/Madrid. La multinacional española TINO está realizando numerosas actuaciones de reforestación de canteras en todas las instalaciones de su propiedad e incluso en canteras de terceros. La compañía de piedra natural acaba de dar por finalizado, tras varios años de trabajo, el laborioso proceso de restauración de una cantera propia en Alhama (Almería), y se encuentra sumergida en otras actuaciones como la de la cantera de Loja (Granada), que forman parte de su ambicioso plan de reforestación de canteras.
Las distintas fases en el proceso de regeneración de una cantera: tras la finalización de los trabajos de explotación de la cantera, se procede a desescombrar completamente la zona; a continuación, se cubre todo el área de tierra vegetal, para posteriormente sembrar y abonar; el siguiente paso sería la plantación de árboles en los taludes y, finalmente, se procede al mantenimiento de la zona y al cuidado del área durante meses hasta que se consigue restaurarla por completo.
Una reforestación hecha desde la vocación por cuidar el medioambiente
La vocación de TINO por el medioambiente va mucho más allá de lo que marca la legislación minera; se trata de una empresa muy comprometida con el medioambiente y con las localidades en las que se ubican sus explotaciones, ya que éstas suelen ser los lugares de residencia de los propios trabajadores de las canteras. TINO, que apuesta por favorecer en lo posible el entorno en el que actúa, se preocupa siempre por desarrollar una labor muy ambiciosa de revegetación en lo que en su día fue una cantera, y mantiene la conservación constante de la zona durante varios años. Con ello, cumple con su compromiso medioambiental y social, y consigue además devolver a la zona la riqueza que de ella ha extraído.
En cuanto a las labores que actualmente lleva a cabo TINO en España, la empresa está en plena fase de restauración de la cantera de piedra color crema real en Loja (Granada). Por otro lado, la empresa está participando en labores de limpieza de escombreras en el resto de canteras de roca ornamental de la Sierra de Loja. Así, la compañía también de dica esfuerzos al aprovechamiento de los materiales que forman las escombreras. Estos materiales inertes (básicamente rocas de distintos tamaños, restos del proceso de extracción de piedra de las canteras), que en principio suponen un gran problema para los explotadores de canteras y para el medioambiente -en ocasiones ocupan hasta 200.000m3-, son aprovechados para su uso como materiales de construcción (escollera y áridos), y también como materiales de restauración (finos y tierras de recubrimiento).
De esta forma, además de eliminar el impacto visual que supone la presencia de escombreras en las canteras, se produce también una puesta en valor de materiales que hasta el momento no tenían ningún aprovechamiento, lo que se traduce en una mejora de la rentabilidad de las canteras de piedra ornamental y en un beneficio ecológico para la zona. Estos materiales, además, generan un beneficio medioambiental añadido, al sustituir parcialmente a los áridos procedentes de las canteras de áridos, con lo que disminuye así la necesidad de abrir nuevas canteras de este tipo, ya que parte de la demanda de estos materiales serán aportados desde las escombreras.
Una política medioambiental consecuente
La piedra que TINO extrae en diferentes partes del mundo es el corazón del negocio de la compañía de origen almeriense, que vende dicha piedra en sus diez tiendas repartidas por el globo terráqueo -cinco de ellas en España-, en forma de revestimientos para suelos y paredes y de complementos, como lavabos o bañeras. Por eso, desde su nacimiento hace más de veinte años, para la compañía ha sido siempre fundamental cuidar el entorno del que proceden sus materiales.
El presidente y fundador de la compañía, Antonio Valdés, considera la labor de regenerar el entorno de sus canteras como "una obligación, pero a la vez como una de las mayores satisfacciones que tenemos hacia las zonas en las que alguna vez hubo una cantera nuestra. Si el proceso de producción es sólo una pequeña parte del precio final de un metro cuadrado de piedra en nuestras tiendas, -afirma Antonio Valdés-, para nosotros es importantísimo llevar a cabo esa labor regeneradora con la mayor generosidad posible, pues es entonces cuando tenemos la oportunidad de expresar nuestro agradecimiento a la sociedad local sobre el mismo terreno que se nos ha permitido explotar". A los argumentos de la razón, Valdés añade "los del corazón: TINO es la única empresa en el mundo que ha hecho de la piedra, una marca; si no nos sintiésemos comprometidos con devolverle a la naturaleza la riqueza que ella nos ha dado para que nuestra empresa exista, seríamos unos desagradecidos. Lo menos que podemos hacer es preocuparnos por que las zonas que un día fueron explotadas por TINO, vuelvan a ser paisajes maravillosos con los que todos podamos disfrutar".
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