Fuente: Madrid/Geoscopio
El Teide es un símbolo de la naturaleza española y del modelo de conservación de los parques nacionales pues con su declaración arranca la idea de que estos espacios se deben gestionar y ordenar y no son sólo lugares estéticos.
50 AÑOS DE HISTORIA
El Parque Nacional del Teide fue declarado el 22 de enero de 1954. Es el más antiguo y mayor de los parques canarios. con una superficie de 18.990 hectáreas. Situado en la parte central de la isla de Tenerife, es representativo de sistemas ligados a procesos volcánicos y vegetación asociada de la Región
Macaronésica. Fue el más visitado de la Red el pasado año, con 3,4 millones de turistas.
En estos 50 años se han producido hitos claves en la historia de los parques: en 1969, con la creación del Parque Nacional de Doñana, se considera, por primera vez, a los animales como elemento clave de la declaración; en 1989 se crea la Red de Parques Nacionales y en 1995, el Organismo Autónomo Parques
Nacionales. Así mismo, con la creación del Ministerio de Medio Ambiente en 1996 se dio un decidido impulso a la política de conservación en España.
Como balance de estos cuatro años, la ministra destacó la creación del Parque Nacional de las Islas Atlánticas (Julio de 2002) y unas inversiones de 190
millones de euros en parques nacionales, una buena parte de ellos destinados a programas de conservación y recuperación de flora y fauna en peligro como el
quebrantahuesos en Ordesa y Aigües Tortes, el lince y el águila imperial en Doñana y el urogallo en los Picos de Europa.
Las zonas del entorno de los parques nacionales han recibido 48,3 millones de euros en subvenciones, lo que ha supuesto triplicar el presupuesto destinado en
la legislatura anterior. Las subvenciones fueron encaminadas, especialmente, a la creación de empresas de turismo rural, recuperación de la tipología
constructiva tradicional de los núcleos rurales o recuperación de elementos singulares y sistemas asociados a la agricultura tradicional
RIQUEZA BIOLÓGICA
El Parque Nacional del Teide forma parte de la Red NATURA 2000 y cuenta con el Diploma del Consejo de Europa a la Gestión y Conservación categoría A en
1989, renovado en 1994 y 1999, y a la espera de renovación en 2004. Este galardón sólo se concede a algunos territorios que, teniendo un valor internacional desde el punto de vista de la
conservación del medio ambiente, gozan además de un régimen de protección suficiente y están razonablemente bien gestionados. Asimismo, es candidato a la declaración de Patrimonio de la
Humanidad, por parte de la UNESCO.
Tiene en el Pico del Teide (3.718 m> su máxima cota que es, además, un símbolo por ser el techo de España. Su paisaje es un monumento geológico de los más espectaculares del mundo, en el que los conos volcánicos y las coladas de lava forman un extraordinario conjunto de colores y formas Hay que destacar su gran riqueza biológica, el extraordinario alto porcentaje de especies vegetales endémicas y la importancia, en cuanto a número y exclusividad, de su fauna invertebrada.
El Parque Nacional del Teide alberga, en cuanto a flora vascular, 58 endemismos del Archipiélago Canario, 33 propios de la isla de Tenerife y 12 exclusivos del Parque Nacional. Los más característicos son la retama del Teide, el codeso, la hierba pajonera, la violeta del Teide y el rosarillo de cumbre.
En cuanto a la fauna, cuenta con tres especies endémicas de reptiles (lagarto, salamanquesa y eslizón) y otras tantas de aves (pinzón azul, herrerillo y picapinos) y una enorme riqueza de fauna invertebrada.
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