El Gobierno ha aprobado un Real Decreto de medidas urgentes en el sector vitivinícola, con el objeto de establecer el marco jurídico que haga posible la adopción de lo previsto en el Plan de actuación para el sector vitivinícola, elaborado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), en el que se incluyen actuaciones para adecuar la oferta a la demanda, medidas de reforzamiento del control, organización y promoción.

El régimen de reestructuración y reconversión del viñedo se ha adaptado a los cambios introducidos por la normativa comunitaria, por lo que se han fijado las condiciones exigidas a los jóvenes agricultores para poder aportar derechos de nuevas plantaciones a los citados planes y se ha fijado el plazo en el que el productor puede renunciar a los anticipos contemplados en dicha normativa.

Por otro lado, se ha considerado conveniente ampliar el plazo en que las Comunidades Autónomas (CC.AA.) deben comunicar al MAPA los gastos realizados en cada campaña en los planes de reestructuración y reconversión del viñedo, fijándose en el último viernes de mayo de cada año.

En esta norma también se establece un nuevo marco general que regula el acceso a determinadas ayudas contempladas en la organización común del mercado del sector vitivinícola, introduciendo una nueva declaración de origen y destino de las producciones, entre otras novedades.

Este nuevo capítulo tiene por objetivo proteger la calidad limitando las producciones, al condicionar algunas ayudas a que no se superen unos determinados rendimientos, así como controlar el destino de las producciones.

Además de la modificación de los reales decretos que regulan el potencial de producción vitícola, por un lado, y de declaraciones de existencias, cosecha de uva y producciones del sector vitivinícola por otro, se crea el Comité Técnico para Promoción de Vinos de España, en que está representada la Administración General del Estado, las CC.AA. y el sector vitivinícola, al que se le encomiendan funciones de asesoramiento para la promoción de los vinos españoles en el mercado interior.

Por otro lado, el MAPA, en colaboración y coordinación con las CC.AA., instrumentará una línea de ayudas para la formación de gestores y directivos de cooperativas e industrias del sector vitivinícola, en el marco de una Plan Nacional Coordinado.

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