Esta nueva planta forma parte del plan del Gobierno Valenciano por gestionar adecuadamente los residuos generados en toda esta Comunidad, dotando a las tres provincias de las instalaciones con las más modernas tecnologías.

Esta diseñada para tratar en primera instancia los residuos sólidos urbanos procedentes de la recogida convencional, pero ya está preparada para ir tratando de forma gradual y total los residuos procedentes de recogidas selectivas de materia orgánica y otros residuos procedentes de poda, residuos agrícolas o vegetales.

La planta de tratamiento y compostaje ocupará una superficie de 800.000 metros cuadrados y tendrá una capacidad para tratar más de 123.000 toneladas/año con una capacidad total anual de compost de 220 metros cúbicos.

Estas instalaciones han supuesto una inversión de 15.000.000 de euros de los cuales el 80% ya cuentan con financiación europea. Además de dar servicio a Xixona, la planta dará servicio, también, a otros 37 municipios de su área de influencia, por lo que en definitiva se atenderá a una población de más de 235.000 habitantes.

Esta planta se une a otras infraestructuras de residuos, como la Planta de Transferencia de Residuos Sólidos Urbanos, planta de clasificación de envases y el ecoparque de Benidorm o la Planta de Reciclado y Compostaje con vertedero de Rechazos de Villena (con un presupuesto superior a los 11 millones de euros) o la Planta de Transferencia de Alcoy cuyo presupuesto es de 2.700.000 euros.

El vertedero de rechazo, que únicamente recogerá los residuos provenientes de la Planta de Reciclaje y Compostaje, tiene un volumen de 2.047.369 metros cúbicos y una vida útil de 30 años.

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