Según los datos publicados hoy por el INE el Producto Interior Bruto (PIB) registró en el segundo trimestre del año un aumento del 2% en relación con el mismo periodo del pasado año, cifra idéntica a la del primer trimestre. Este crecimiento es, aproximadamente, 1,3 puntos superior a la media de la zona euro.

La estabilización del crecimiento económico del segundo trimestre del año interrumpe la tendencia a la desaceleración de los dos trimestres previos y, posiblemente, anticipa una flexión al alza en la segunda parte del año en consonancia con los signos de recuperación que se proyectan para la economía mundial.

Hay que señalar que todas estas cifras se refieren a las series corregidas de calendario y estacionalidad a las que el INE ha comenzado en el presente año a dar prioridad en la presentación de los resultados de la Contabilidad Nacional Trimestral, en sustitución de las series de ciclo-tendencia anteriormente utilizadas.

El crecimiento de la economía española sigue superando ampliamente al promedio de la zona euro que, según las previsiones de la Comisión Europea, podría haberse situado en el segundo trimestre en el intervalo del 0,5%-0,8%, en tasa interanual. Este diferencial positivo prolonga el proceso de convergencia real en renta y empleo característico de los últimos años.

Según estos datos hacen pensar que la economía española ha estabilizado su ritmo de crecimiento económico en el segundo trimestre, tras dos trimestres consecutivos de ralentización, debido a la mejora de la contribución neta del sector exterior, que pasa a mostrar un signo positivo.

Por consiguiente, estos resultados permiten anticipar una flexión al alza del ciclo económico en la segunda parte del año, en paralelo con la gradual recuperación esperada para la economía mundial y, en particular, para las economías europeas.

Por lo que se refiere al empleo, los ocupados en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo registraron en el segundo trimestre un aumento interanual del 1,4% (series corregidas), una décima superior al del trimestre precedente. Lo que ha supuesto la creación de 224.000 puestos de trabajo a tiempo completo en el último año

Esta aceleración se debe, exclusivamente, al empleo asalariado, cuyo ritmo de crecimiento se intensificó dos décimas, hasta el 2,2%, mientras que, por el contrario, los no asalariados aumentaron seis décimas su tasa de caída, hasta el -2,3%. La remuneración de los asalariados modera su ritmo de aumento una décima, hasta el 5,8% debido a un menor crecimiento del coste salarial por persona.

Días antes de publicarse estos datos, la Unión Europea daba a conocer los datos finales de empleo correspondientes al pasado año, señalando que el número de número de empleados en Europa era de 161,3 millones, 2,3 millones de personas más que el año anterior. Lo que hace que el 63,9% de la población europea tenga empleo. En este mismo periodo, el empleo de la mujer también creció, alcanzando al 54,8% de la población femenina, casi un punto más que el año anterior.