La central de Besos junto a la que se construye en Tarragona, ambas de 400 MW, permitirán un incremento de la potencia instalada total en Cataluña de aproximadamente un 10%.

Por su parte, en Andalucía el ciclo combinado de San Roque y el de Huelva, actualmente en proceso de construcción, de 400 MW cada uno, supondrán un incremento del 16% de la potencia en esa Comunidad Autónoma.

Ambos proyectos han supuesto una inversión total de alrededor de 360 millones de euros. Ambas centrales son prácticamente idénticas en lo que se refiere a su diseño básico. Utilizarán gas natural como combustible principal y gasóleo como combustible de respaldo.

Están dotadas de técnicas avanzadas que les permiten reducir de manera significativa su impacto medioambiental, obtener un elevado rendimiento energético -gracias a las turbinas de gas con cámara de combustión secuencial- y disponer de una adecuada flexibilidad de operación.

Su diferencia más acusada es que la refrigeración de la central de San Roque es de circuito cerrado con torres de refrigeración de tiro forzado mientras que la de Besós es de tipo abierto con agua de mar.

Por lo que se refiere al resto de los ciclos combinados que ENDESA construye en la Península, el de Tarragona y el de Huelva, entrarán en servicio, según las previsiones, antes del mes de agosto de 2003 y en el primer trimestre de 2004, respectivamente.

Además, en los sistemas insulares ENDESA ha puesto en marcha la construcción de tres nuevas centrales de ciclo combinado, dos en las Islas Canarias, en Granadilla (Tenerife), y en Barranco de Tirajana (Gran Canaria) y un nuevo ciclo en Baleares, en Son Reus.