La tecnología de utilización de gas natural en ciclos combinados permite alcanzar niveles de rendimiento energético del 60% frente al 36% de una central térmica convencional, y exige plazos de construcción más reducidos, además de proporcionar claras ventajas en materia de preservación del medio ambiente.

Concretamente, reduce entre un 50% y un 60% las emisiones de CO2 y en un 80% las de Nox respecto de las centrales térmicas convencionales de carbón o fuelóleo, no supone prácticamente emisiones de SO2 y las de partículas son mínimas.

Además, en el diseño arquitectónico de las unidades emplazadas en Sant Adrià de Besòs, se han tenido en cuenta, en particular, criterios de compatibilidad con el paisaje del entorno en el que se hallan ubicadas, de acuerdo con la transformación del frente litoral y la margen derecha del río Besos.

Las empresas Gas Natural y Endesa han sido las pioneras en España en la introducción y desarrollo de la tecnología de generación eléctrica con ciclos combinados, que destaca por sus ventajas en rendimiento, eficiencia y menor impacto ambiental.