Además, la superficie de nuevos paneles solares supone un aumento respecto a 1999 de más de 2.500 metros cuadrados y un incremento porcentual entre 1999 y el 2000 de un 168%. Durante este año, el porcentaje de crecimiento se espera que ronde el 300% respecto al año 2000.

Los más de 40.000 metros cuadrados instalados en la Comunidad Valenciana aportan cerca de 3.270 toneladas equivalentes a petróleo (tep), unos 38 millones de kilovatios/hora, que evitan la emisión de 22.000 toneladas al año de CO2.

Según datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el incremento que se produjo en la Comunidad Valenciana representa un 11% del total registrado en España que se situó en los 35.670 metros cuadrados. De este modo, la Comunidad Valenciana se ha colocado entre las tres primeras autonomías españolas que mayor aumento de paneles solares térmicos ha realizado.

Por su parte, el Instituto de la Mediana y Pequeña Industria Valenciana apoyó el año pasado 147 proyectos en materia de energía solar térmica con una subvención de 55 millones de pesetas que generaron una inversión privada de 271 millones.

Esta actuación se enmarca dentro del Plan de Energías Renovables del IMPIVA. Esta iniciativa permite respaldar iniciativas para el aprovechamiento de las energías geotérmicas, minihidráulicas, solar, eólica o biomasa. En total, se aprobaron, el año pasado, 254 proyectos que propiciaron, para su puesta en marcha, una inversión privada de cerca de 1.300 millones de pesetas.