El vertido esta totalmente controlado y señalaron que finalmente se vertieron del orden de 500 litros de esta sustancia, de los casi 1.000 litros de capacidad del contenedor.

Aunque parte del liquido se vertió en las alcantarillas antes de que los bomberos pudieran proceder a esparcir sepiolita, un material absorbente, "se ha disuelto sin afectar al PH" y "no se ha producido peligro ni para la red de saneamiento ni para la de agua potable", explicaron las mismas fuentes.

En el suceso dos policías municipales de Fuenlabrada resultaron heridos leves con irritaciones en las mucosas aunque pudieron permanecer en su trabajo. Los hechos tuvieron lugar en el Polígono Industrial Cobo Calleja, tras recibirse el aviso de que, al parecer, se había producido un vertido tóxico.