El objetivo que se pretende con esta planta es basar el abastecimiento de la ciudad de Melilla en la utilización de un recurso hídrico de coste elevado pero con calidad adecuada, en cantidad suficiente y con garantía asegurada.

El proyecto contempla la ejecución de una planta de desalación de agua marina por el procedimiento de ósmosis inversa, capaz de desalar 20.000 metros cúbicos cada día. La planta de desalación se ejecutará en una plataforma a construir en un acantilado en la costa norte del territorio de Melilla.

Para el futuro se prevé que la población servida pueda alcanzar un máximo de 90.000 habitantes y una demanda unitaria diaria de 300 litros por habitante, por lo que la planta desaladora deberá ampliarse hasta un máximo de los 27.000 metros cúbicos al día.

Esta actuación se desarrollará mediante una concesión para la ejecución del proyecto, construcción de las obras y explotación de la desaladora durante un periodo de doce años.