De España calificó la puesta en marcha de la estación de residuos sólidos urbanos de la comarca del Bajo Vinalopó, ubicada en la partida ilicitana de Els Cremats, de "paso histórico en la adecuación a las exigencias normativas de la Unión Europea".

"Esta planta transformará los residuos sólidos en productos adecuados al entorno medioambiental en que vivimos, o bien en compost para la agricultura o en productos reutilizables en la restauración de canteras y minas", declaró De España.

A su juicio, con esta estación "queda resuelto un gran problema gracias esfuerzo común y la concienciación de que se trataba de una infraestructura necesaria para adecuarnos al desafío de Europa".

Destacó que la Conselleria de Medio Ambiente ha destinado, a través de fondos europeos, el 70 por ciento de los 2.300 millones de pesetas, mientras que la Diputación y los municipios del Consorcio del Bajo Vinalopó han aportado a partes iguales el importe restante.

El máximo responsable de la institución provincial recordó que el pasado viernes la Diputación y el Consorcio aprobaron el "proceso de trámites necesario para que la planta funcione y se adecúe a la normativa legal".

Según recoge el pliego de condiciones, la empresa que ha construido la planta tiene la obligación de poner en funcionamiento el sistema, así como adecuar el personal al funcionamiento de la maquinaria mediante un aprendizaje progresivo durante dos meses, especificó De España.

En el encuentro mantenido el pasado viernes entre ambas instituciones se acordó, asimismo, el concurso para adjudicar la concesión del funcionamiento de la planta por 13 meses "para evitar que se paralicen los trabajos mientras que posteriormente se decidirá el sistema de gestión de la planta para el futuro".

Por otra parte, De España avanzó que el Ayuntamiento de Elche y la Conselleria de Medio Ambiente han llegado a un acuerdo para la implantación en el municipio de un tercer contenedor amarillo, destinado a plásticos.

El convenio estipula que la Generalitat sufragará los gastos de instalación del modelo preestablecido, mientras que el consistorio se encargará del incremento del coste que supondrá su recogida.