Fuentes de la Generalitat han informado que la concesión de estas ayudas, de las que se van a beneficiar un total de trece empresas de la Comunidad Valenciana, siguen la premisa desarrollada por la Conselleria en materia de gestión de residuos peligrosos.

Según declaró la directora general de Educación y Calidad Ambiental, Pilar Máñez, esta política tiene como principios básicos la prevención de posibles riesgos sobre la salud humana, los recursos naturales y el medio ambiente, eliminando su peligrosidad, y evitando la transferencia de contaminación a otro medio receptor.

Por ello, la legislación vigente obliga a la gestión adecuada, a través de gestores autorizados, de este tipo de residuos. "Sin embargo -dijo Máñez- hay que tener en cuenta las dificultades que surgen para la aplicación de este principio para determinados tipos de residuos peligrosos que se generan en pequeñas cantidades por un gran número de productores, como podrían ser los generados a nivel domiciliario".

Según la directora general, "para la gestión de estos residuos es necesaria una eficaz recogida selectiva en los distintos puntos de producción, para su posterior traslado a un destino final adecuado. Para ello es indispensable una concienciación ciudadana, y una eficaz red de recogida".

Todas las empresas a las que se les ha concedido esta ayuda han realizado o van a realizar actividades de gestión de los residuos mencionados, y cuentan, además, con autorización de la Conselleria de Medio Ambiente para la gestión de los mismos y están ubicados en la Comunidad Valenciana.