Durante la reunión del Consejo Nacional del Agua, presidido por el ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, el ministro de Agricultura, Miguel Arias, presentó el Plan Nacional de Regadíos (PNR), y se debatió sobre la trasposición de la Directiva Marco de Aguas y sobre algunos aspectos puntuales del Plan Hidrológico Nacional (PHN).

Dicha Directiva europea se incorporará al derecho español "de abajo a arriba", explicó Fernández, pues será el Consejo, y no el Gobierno, el que elabore la trasposición "con la ayuda de todos los agentes sociales implicados: Ecologistas, regantes y comunidades".

Entre los aspectos que se han debatido del PHN, el Consejo se mostró a favor de que sea el Gobierno y no el Ejecutivo autonómico de Aragón el que corra con el coste de las expropiaciones requeridas en esta comunidad para las obras "que aún no se han hecho" previstas en este Plan, que, según Fernández, entró ayer en vigor.

El secretario de Estado de Aguas explicó que esta decisión responde a una petición del Partido Popular de Aragón, y se llevará en una semana al Consejo de Ministros para su aprobación definitiva. En cuanto al PHN en las costas del norte de Galicia, Fernández matizó que éste es "el último plan hidrológico de cuenca que aún no ha sido aprobado", por lo que se presentó en el Consejo para que dictamine al respecto.

Por otra parte, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) consideró que el Plan Nacional de Regadíos (PNR) es "poco ambicioso, con una financiación y superficie insuficientes", mientras que la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) afirmó que está "cojo", porque no plantea la reordenación de regadíos acorde con la realidad de la agricultura.