Acompañado por los ministros de Economía, Rodrigo Rato, y de Medio Ambiente, Jaume Matas, el presidente del Gobierno detalló los objetivos de la Estrategia, para cuya elaboración se creará en breve una comisión interministerial de coordinación, encuadrada dentro de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos.

El proyecto consiste en la elaboración de un marco de referencia para todas aquellas medidas dirigidas a la sostenibilidad y en su fase de elaboración, la Estrategia establecerá para su puesta en marcha instrumentos de aplicación que incluirán las medidas institucionales, los planes sectoriales de desarrollo sostenible, las actividades a nivel local y la participación pública a través de la información, formación y educación.

El Gobierno español concluirá el proyecto en el año 2002, coincidiendo con la Presidencia española de la Unión Europea y la celebración de la Cumbre de Naciones Unidas de Desarrollo Sostenible. Esta iniciativa es paralela a la Estrategia Europea de desarrollo Sostenible que la Unión Europea está elaborando.

El presidente del Gobierno subrayó que el proyecto completa el compromiso político de la Unión Europea con las reformas económicas y sociales que comenzaron en el Consejo de Lisboa.

Aznar comentó que el desarrollo sostenible es, ante todo, un instrumento de progreso. Crea valor añadido, genera empleo y garantiza la conservación del patrimonio natural sin hipotecar con ello el desarrollo económico.

La Estrategia incluirá un Sistema de Indicadores de Progreso, que será revisado con una periodicidad de cinco años, adelantó Matas a las más de doscientas personas presentes en el acto, celebrado bajo la Pérgola Fotovoltaica del Complejo de la Moncloa.

En la misma línea, el vicepresidente segundo y ministro de Economía insistió en que el objetivo principal del proyecto consistirá en conciliar el desarrollo económico y social con la preservación del entorno.

A juicio de Rato, las exigencias de protección del medio ambiente no sólo implican costes económicos e ilustró en ese sentido que el mercado ambiental representa en España el 1,6 por ciento del PIB, frente al dos por ciento de media de los Quince, lo que significa que existe un margen de crecimiento.

Tras la intervención de Matas y mientras se proyectaba un vídeo sobre el Plan Hidrológico Nacional, los representantes de Greenpeace, Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, WWF/Adena y Sociedad Española de Ornitología (SEO) se levantaron de sus asientos y tras reprobar la política del Gobierno en materia ambiental abandonaron los jardines del Palacio de la Moncloa.

Los ecologistas consideraron una "vergüenza" que mientras el Ejecutivo presentaba un proyecto para compatibilizar el crecimiento económico con la preservación del medio ambiente, hacía menos de doce horas que aprobó (en el Senado) un Plan Hidrológico Nacional absolutamente contrario a esta filosofía. Al término del acto el portavoz de Medio Ambiente del PSOE en el Congreso de los Diputados, Víctor Morlán, manifestó a la prensa que compartía la actitud de los ecologistas.