Fuente: EFE.
El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, afirmó hoy que el Plan Hidrológico Nacional (PHN) que aprobó ayer por la tarde el Senado demuestra la "voluntad de diálogo del Gobierno", si bien reconoció que el hecho de que no lo haya apoyado el PSOE hace que este proyecto no sea "el mejor".
Matas hizo estas declaraciones en los pasillos del Senado, pocas horas antes de que presentase el PHN ante el pleno de la Cámara Alta, que lo posteriormente lo aprobó definitivamente en su último trámite parlamentario.
Para el titular de Medio Ambiente, el "resultado final" del Plan Hidrológico Nacional "no es el mejor sin duda, porque ojalá hubiéramos podido conseguir un acuerdo con todos los partidos políticos, incluso con el Partido Socialista".
Jaume Matas afirmó que el actual diseño del plan responde a un proceso que ha puesto de manifiesto que la voluntad del Gobierno "era la de negociar" y recordó que el primer borrador data del 5 de septiembre pasado y que tras cinco meses de trabajos fue "modificado sustancialmente, enriquecido y mejorado".
Estos cambios, apuntó, obedecieron a las negociaciones con ecologistas, autonomías y colectivos afectados, de manera que el 80 por ciento del Consejo Nacional del Agua aprobó el plan, unánimemente apoyado por regantes y usuarios, "algo que no había sucedido nunca", destacó.
También hizo hincapié en que ha sido apoyado por la mayoría de las comunidades autónomas, incluso alguna gobernada por el PSOE, como Castilla-La Mancha, en la misma línea de "consenso y diálogo" que después ha continuado en su tramitación parlamentaria, con el apoyo de CiU y de Coalición Canaria.
Sin embargo, la portavoz socialista y secretaria de Medio Ambiente del PSOE, Cristina Narbona, calificó hoy de "escándalo" el paso del Plan Hidrológico Nacional (PHN) por el Senado "no sólo porque el PP no ha aceptado ni una de las más de 500 enmiendas presentadas, sino porque no ha recibido el informe de la Comisión de Comunidades Autónomas".
El ministro afirmó, además, que el PHN va a resolver los problemas del agua en Aragón y en las tierras del Ebro, reiteró que es un proyecto "que no va contra nadie ni perjudica a nadie" y subrayó que "esta es la ley que va a resolver el problema del agua en España".
Se mostró convencido de que, por solidaridad, una vez que se resuelvan las necesidades de agua en Aragón y las tierras del Ebro "nadie se va a oponer a que después, si existen excedentes", el agua sobrante pueda llegar a otras zonas necesitadas en Cataluña, Valencia, Murcia o Almería.
Por su parte, la portavoz socialista, auguró una "vida tormentosa" al PHN y aseguró que "no va a solucionar los problemas de calidad y cantidad de agua", ya que sólo promete un trasvase de 1.050 hectómetros cúbicos desde el delta del Ebro, "para quedar bien con los votantes del litoral mediterráneo".
"Estamos convencidos de que el trasvase no se hará, porque en cuanto se apruebe la ley comenzará a haber recursos ante diversos tribunales, posiblemente incluido el Constitucional, y quejas ante la Unión Europea", apuntó Narbona.
Enviar la noticia a un colega