Hoy se pone en marcha una nueva línea de la Desaladora de Palma y antes de fin de mes entrará en servicio la última. Con estas medidas se podrá garantizar el suministro de agua a las zonas de Palma, Andratx y Calvià y conseguir una recuperación mucho más rápida de los acuíferos.

La desaladora que inició su funcionamiento el mes de julio de 1999, con un total de seis líneas, cada una de las cuales tenia una capacidad de 7.000 metros cúbicos diarios, lo que hacía un total de 42.000 metros cúbicos. No obstante, esta producción podía aumentarse mediante la puesta en marcha de tres líneas más.

Así, en agosto del año pasado entró en funcionamiento la séptima línea, con la cual se alcanzaron los 52.000 metros cúbicos al día.

Con la puesta en marcha de estas dos últimas líneas, la producción total de la desaladora alcanzará su máxima capacidad, con 65.000 metros cúbicos diarios de agua.

A esta cantidad hay que añadir los 15.000 metros cúbicos diarios de las desaladoras móviles, con lo que se tiene una producción diaria de agua desalada de 80.000 metros cúbicos.

Con estas acciones quedará garantizado el suministro de agua en la bahía de Palma, Calvià y Andratx, ya que esta producción supondrá el 60% de la demanda de agua que se produce en verano; y el 90% de la registrada en invierno.

Además, con los excedentes que se producen en invierno se podrán recuperar con mayor rapidez los acuíferos. La recuperación de los acuíferos -juntamente con el hecho de garantizar el consumo- era uno de los objetivos perseguidos por el gobierno balear a la hora de impulsar la desalación.