El Departamento de Transportes del Estado de Florida (FDOT) ha adjudicado a
ACS Infrastructure Development, la filial norteamericana de concesiones del
Grupo ACS, la concesión durante 35 años de la autopista interestatal I-595.
El contrato, por valor de unos 1.000 millones de euros, consiste en la
financiación, diseño, construcción, operación y mantenimiento de esta
infraestructura viaria durante los próximos 35 años. El periodo de
construcción tiene una duración aproximada de 5 años y el de operación de
30, lo que supone que ACS estará operando la autopista hasta el año 2044.
Dragados se encargará de los trabajos de construcción, que incluyen la
ejecución de tres carriles reversibles en la actual mediana de la autopista y
la renovación de nueve enlaces.
El proyecto ya cuenta con la financiación asegurada para su desarrollo, que
incluye un 10% de capital y un 90% de deuda. El 50% de ésta será financiada
con un crédito del Gobierno Federal proveniente de sus fondos para el
desarrollo de infraestructuras de transportes (Programa TIFIA) con vencimiento
en el año 2044, y el resto por el “pool” de bancos que participan en la
oferta: Santander, BBVA, SG, Calyon, Royal Bank of Canada, Lloyd’s, RBS y
Fortis.
La I-595 constituye uno de los ejes principales de infraestructuras del Sur de
Florida al unir Fort Lauderdale y Miami con la costa oeste del Estado, y ya
cuenta con un tráfico actual de 130.000 vehículos día que habrá que
mantener mientras duren los trabajos de construcción.
Según las autoridades del Departamento de Transportes de Florida, la ampliación,
mejora y modernización de la autopista se llevará a cabo en solo cinco años
gracias a que han optado por la fórmula de la concesión y operación
privada. De haberlo hecho por la fórmula tradicional estiman les habría
llevado entre 15 y 20 años.
Con esta adjudicación, el Grupo ACS consolida su presencia en Norteamérica
convirtiéndose en uno de los líderes de la región en concesiones de
Infraestructuras tras sus recientes adjudicaciones en Texas, Florida y Canadá.